Fotógrafo: Giovanni Simeone
Código: PBC490249
En el desierto de Cataviña, la zona geológica más antigua de la Península, se pueden encontrar fósiles de dinosaurios y cantos rodados de granito redondeados por el viento. La vegetación se limita a los cactus y la Fouquieria columnaris, llamada "Cirio" por su parecido con una vela de iglesia. Este cactus, que alcanza hasta 20 metros de altura, es el segundo representante de una antigua familia. Cataviña es un cruce de caminos entre Baja California y Baja California del Sur, con interesantes excursiones, que incluyen restos de una misión, pozas de aguas cristalinas y pinturas policromadas indígenas. Lejos de los centros habitados, ofrece un cielo nocturno libre de contaminación lumínica, perfecto para la observación de estrellas.
La fotografía ofrece una mirada íntima a estos gigantes del reino vegetal, destacando su inesperada elegancia. Los rayos dorados del sol acentúan los detalles de las espinas y perfilan el imponente perfil de la planta, dándole un aura de majestuosidad.
